• La infraestructura de 2.215 m2, con 16 salones, un aula múltiple y otros espacios, facilitará el desarrollo integral de niñas y niños de primera infancia que viven en la comuna 2 del municipio.
• En la comuna donde fue inaugurada la sede viven 750 niñas y niños de un año y 3.265, entre 1 y 4 años, según reporte de la Alcaldía de Soacha.
• A partir de las 5:00 p. m. y los fines de semana, este Centro de Desarrollo Infantil también hace las veces de Centro de Bienestar Integral para a aprovechar su infraestructura, ofreciendo servicios de educación, recreación y deportes para toda la comunidad.

Se trata del segundo Centro de Desarrollo Infantil (CDI) que abre Compensar en Soacha, con una capacidad de atención para 290 niñas y niños, entre los 2 a 5 años y 11 meses, que residen en el entorno (1.5 km según la norma) y Hogares Soacha, megaproyecto de vivienda de Compensar con más de 27.000 familias.

“La sede cuenta con 16 salones, un aula múltiple, comedor, cocina, parque infantil, entre otros espacios que han sido habilitados con el propósito de contribuir en asegurar la educación inicial, en el marco de los programas de Atención Integral a la Niñez (AIN), que venimos implementando en el territorio, y que contemplan varios componentes entre los que se incluyen salud y nutrición, ambientes adecuados y seguros, acompañamiento a la familia, comunidad y redes, promoviendo el desarrollo integral de niñas y niños en primera infancia”, aseguró Ana Beatriz Cárdenas Restrepo, gerente de Educación de Compensar.

Precisamente, durante el 2022, en el CDI que viene funcionado en Soacha desde 2017, se logró impactar de forma positiva a 400 niñas y niños de 0 a 5 años y 1.200 niños, niñas y sus familias en modalidad de acompañamiento familiar, que se distingue por tener una apuesta pedagógica innovadora que incluye a padres, madres y cuidadores en torno al bienestar de la niñez, lo anterior en convenio con la alcaldía municipal.

“Como respuesta a la alta demanda de las familias con niñas y niños de primera infancia, y a la lista de espera para que puedan ser atendidos, vimos la necesidad de aumentar la capacidad de cupos generando la apertura al nuevo CDI”, afirmó la directiva.

Además de estos dos Centros de Desarrollo Infantil, Compensar continúa robusteciendo su impacto social en este municipio a través de su plataforma de servicios: Vivienda, Salud, Educación, Recreación, Deporte, Agencia de Empleo y Fomento Empresarial, entre otros.

La educación inicial, un desafío a superar dentro de los ODS

Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística- DANE, más de 15 millones de colombianos son niñas, niños y adolescentes (NNA), de acuerdo con el censo poblacional del 2020, es decir, el 31 % de la población total nacional. De esa cifra, 4.7 millones son de primera infancia, o sea, entre los 0 y 5 años.

Se calcula que, aproximadamente, el 22 % de los NNA (1.033.000) están en situación de pobreza multidimensional, que se da porque hacen parte de territorios en los que hay necesidades básicas no cubiertas y no todos tienen la opción de acceder a salud, una alimentación balanceada y educación.

Frente a este último, la educación inicial (para el desarrollo integral de la niñez desde su nacimiento hasta cumplir los seis años), es un determinante en la apropiación de herramientas para la vida que permiten una adultez con capacidad de incidir en la sociedad gracias a que proporciona el desarrollo temprano de habilidades tales como el pensamiento crítico, la autonomía, la comunicación, el trabajo en equipo, la creatividad, entre otras competencias.

En ese sentido, dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), la ONU incluyó el desafío para que todos los países ofrezcan programas para el desarrollo de la primera infancia, atención y educación preescolar de calidad en 2030, considerando que las bases del aprendizaje y el desarrollo personal se forjan, en gran medida, durante los primeros años de vida, previo a ingresar a la primaria.

Para el caso colombiano, particularmente frente a la situación de la infancia en el rango de los 0 a 5 años, se hace evidente la necesidad de generar acciones encaminadas a superar las brechas y que cada vez más niñas y niños accedan a programas de educación inicial, acorde con la meta definida en los ODS. De ahí surgen iniciativas como por ejemplo el Fondo Para la Atención Integral de la Niñez y Jornada Escolar Complementaria – FONIÑEZ, en el que distintos actores implementan programas de Atención Integral a la Niñez (AIN) para favorecer a la primera infancia, mujeres gestantes y madres en periodo de lactancia.

Compensar, a través de FONIÑEZ, el año pasado, en alianza con sector gobierno, atendió en Bogotá y Cundinamarca alrededor de 49.000 niños y jóvenes hasta los 16 años, en 24 jardines infantiles y 240 colegios; esto abarca a 25.475 niñas y niños desde los 3 meses a 5 años y 11 meses, en 7 municipios del departamento y en 10 localidades de la capital del país.

“Nuestros jardines están en zonas vulnerables y, en donde está la oferta de Compensar, las familias quieren estar inscritas, y Soacha no es la excepción, por eso le apostamos a un nuevo CDI, con el que buscamos continuar generando momentos de bienestar para la primera infancia, sus padres y cuidadores”, dijo la gerente de Educación de Compensar.

En la comuna 2, donde está ubicada la sede, según el indicador de población de la Alcaldía de Soacha, viven 750 niñas y niños de un año y 3.265, entre 1 y 4 años, lo que indica que son alrededor de cuatro mil niñas y niños en primera infancia; número que recalca la importancia de habilitar espacios que les permitan desarrollarse de manera integral.

Cabe resaltar que la nueva infraestructura, a partir de las 5:00 P.M. y los fines de semana, funciona como Centro de Bienestar Integral (CBI), ampliando la posibilidad de que otros actores de la población se beneficien, por medio de cursos de Educación, Recreación y Deportes, dirigidos a toda la comunidad.

A la fecha, Compensar administra y opera tres CDI propios (dos en Soacha y uno en Girardot), 17 jardines sociales en Bogotá, cuatro jardines municipales (tres en Mosquera y uno en Chocontá), y una modalidad familiar.